domingo, 25 de marzo de 2012

Telepizza dice NO a la Huelga

 
 
Telepizza es una multinacional famosa por sus salarios de miseria y sus condiciones laborales ultra-precarias, mientras acostumbra a cobrar un dineral por unas pizzas que cuestan entre 2 y 3 euros producirlas. Además es también una empresa con prácticas anti-sindicales propias de la Dictadura.


La huelga del pasado 29S contra la Reforma Laboral del Gobierno de Zapatero. En algunas de las tiendas el seguimiento de la huelga fue mucho menor, en ocasiones casi nulo, fruto de la presión, la amenaza y el chantaje de esta patronal.
Que pretende dicha empresa es que nos mantengamos sumisos mientras sigue reduciéndonos los derechos a los trabajador@s. Es un atropello a uno de los derechos fundamentales de los trabajador@s de poder hacer huelga y no dejarles bajo las amenazas de quitar un 16% del sueldo más la cotización de la seguridad social. Hay que pararle los pies a esta patronal esclavista.

Los trabajad@res del Telepizza tenemos que avanzar en organizarnos por abajo en definitiva pelear por nuestro derecho a organizarnos, a protestar y luchar por la mejora de nuestras condiciones laborales, contra el miserable Convenio de “comida a domicilio”, uno de los peores del Estado, donde por ejemplo no existe el concepto de “nocturnidad” o “festivo”.

Espero que muchos compañer@s se den cuenta de esta nefasta situación que nos encontramos los trabajador@s de Telepizza y esta sea la primera batalla de una guerra más ambiciosa, la de ponerle freno a esta patronal ultra-explotadora, facilitar la organización sindical dentro de la empresa y el comienzo de una lucha por un salario y un traajo digno para todos los trabajador@s de la empresa.

Pero, por favor, no pongáis algunos compañeros la zancadilla a los trabajador@s que proponen defenderse y obtener los derechos que les pertenecen.

lunes, 12 de marzo de 2012


La Asamblea de Gamonal 15-M. convoca una manifestación que tendrá lugar el viernes 16 de marzo y que dará comienzo a partir de las 20.00 horas desde la Plaza Santiago. El objetivo de la misma es dar visibilidad al drama de los desahucios y apoyar al vecino de Gamonal que se enfrenta a un proceso de ejecución hipotecaria.

Reenvía esta información a todos tus conocidos/as ya que entre todos, lo conseguiremos. Por un cambio en la Ley de Ejecuciones Hipotecarias.

sábado, 10 de marzo de 2012

35 aniversario de los asesinatos impunes del 3 de Marzo en Vitoria

Los ministros del gobierno responsables políticos de estos asesinatos son: Manuel Fraga Iribarne ministro de Gobernación de viaje en Alemania durante los hechos, Adolfo Suárez que era ministro de Gobernación en funciones durante el viaje de Fraga, Rodolfo Martín Villa ministro de Relaciones Sindicales y Alfonso Osorio Ministro de Presidencia.

Antecedentes

El 3 de marzo de 1976, en Euskal Herria, una de sus ciudades, Vitoria-Gasteiz, sufrió la mayor agresión vivida en su historia contra la clase obrera. Cinco trabajadores fueron asesinados y más de cien resultaron heridos, la mayoría de bala, a resultas de los disparos efectuados por la policía armada española (ahora policía nacional) al desalojar una iglesia, previamente gaseada, en la cual se celebraba una asamblea de trabajadores en huelga.

En una época carente de libertades, en la cual no existían derechos de huelga, manifestación, reunión, etc. y bajo un duro régimen dictatorial, (Franco había muerto unos meses antes) en Vitoria-Gasteiz se estaba desarrollando un movimiento huelguístico ampliamente secundado por varias empresas, en base a unas reivindicaciones puramente sociolaborales.



La Asanblea

Tras dos meses largos de huelga y dos días de huelga general, el 3 de marzo estaba convocada una jornada de paro total. Este paro fue secundado por la práctica totalidad de trabajadores, tanto de empresas en lucha como otras que lo apoyaron solidariamente, así como el comercio, servicios, estudiantes, amas de casa y la ciudadanía en general. Desde la mañana, la policía intervino duramente ante cualquier atisbo de concertación o manifestación, llegando incluso a disparar fuego real, produciéndose los primeros heridos de bala.

Para las cinco de la tarde estaba convocada una asamblea general informativa en la iglesia de San Francisco de Asís del barrio de Zaramaga, lugar donde se acostumbraba realizar las reuniones de las Comisiones Representativas de las empresas en lucha, para informar de los acontecimientos novedosos.


La Agresión

La policía “premeditadamente” dejó que se llenara la iglesia con alrededor de cinco mil personas, permaneciendo en el exterior un número similar, y fue en ese momento cuando mandó desalojar la misma. La multitud allí congregada ante el temor de ser aporreada y agredida en su salida, se negó al abandono del recinto religioso. Hay que recalcar que los templos estaban protegidos por el Concordato, por lo cual no podían actuar ni acceder a su interior las Fuerzas Armadas, salvo urgente necesidad.

Para proceder al desalojo, la policía atacó y asaltó la iglesia con gases lacrimógenos y material antidisturbios, por lo que presos del pánico y la asfixia, los allí congregados comenzaron a salir huyendo, momento en el que los policías procedieron a golpear y disparar indiscriminadamente tanto sobre los que intentaban escapar, como sobre los que desde el exterior atraían su atención para dejar vía libre a los que abandonaban aquel infierno


Asesinados

El resultado, cinco obreros asesinados y unos cien heridos, muchos de ellos de gravedad. Ellos mismos, (la policía) se felicitaban de haber disparado más de mil tiros, de haber producido una masacre y de haber contribuido a la mayor paliza de la historia. Las grabaciones existentes, se recogieron a través de la frecuencia de FM del canal de la policía y se conservan en la actualidad.

En un primer momento, a resultas de los partes hospitalarios enviados al juzgado por ser las personas atendidas, tanto fallecidos como heridos, a consecuencia de disparos y agresiones, se abrieron diligencias previas. Los sumarios abiertos, después de varios recorridos por diversos juzgados y tribunales, acabaron finalmente en la jurisdicción militar, la cual, aun reconociendo que los hechos considerados, eran en principio constitutivos de delitos por homicidio, dictó auto de sobreseimiento por no haber motivos suficientes para acusar de ellos a personas determinadas. Posteriores reclamaciones al Estado por responsabilidad civil, efectuadas por algunos afectados, tampoco fueron atendidas.



(1 de 2)Grabaciones POLICÍA ARMADA carga 03/03/1976


(2 de 2)Grabaciones  POLICÍA ARMADA carga 03/03/1976









jueves, 8 de marzo de 2012

A mis hermanas de género


Como cada 8 de marzo conmemoraremos del Día Internacional de La Mujer Trabajadora, en este día se recuerdan las luchas de cientos de mujeres que han dejado sus vidas por la conquista de sus derechos laborales, pero sobre todo por el reconocimiento y el respeto dentro de sus respectivas sociedades.

Esta conmemoración reivindica a uno de los sectores de la sociedad que más han sufrido los embates del sistema neoliberal, es decir, las mujeres proletarias, quienes día con día tienen que hacer esfuerzos sobre humanos para sacar adelante a sus familias.

Estas mujeres han sido las victimas constantes del entorno social reinante, en el que el patriarcado, de la mano y alimentándose siempre con el capitalismo, impone su ley. La violencia sistemática que viven las mujeres de las clases proletarias, además del ámbito doméstico, se ve reflejada en el centro laboral, donde la mayor parte de las veces lo que se ve son tratos denigrantes hacia la mujer, los cuales pueden ir desde jornadas laborales que sobrepasan las horas estipuladas en la ley (sin que se les retribuya económicamente el tiempo extra que laboran), hasta ser vistas y tratadas como meros objetos sexuales por parte de sus compañeros masculinos. Además de que la mayor parte son víctimas de maltrato sicológico por parte del patrón, esto por supuesto, vulnera la dignidad de las mujeres como seres humanos.
                                   

A diferencia de los hombres, estas mujeres cubren dobles jornadas de trabajo, una en sus centros de labores, en la que en la mayoría de los casos perciben salarios muy inferiores respecto a sus compañeros masculinos; y otra en el ámbito doméstico, ya que son ellas quienes prácticamente llevan en sus hombros el peso del hogar.

El trabajo que realizan en el hogar nadie se los remunera, ya que se considera como una obligación prácticamente exclusiva de la mujer, nadie reconoce el gran esfuerzo que esto implica; pero muy diferente resulta cuando un hombre ayuda a la mujer con alguna labor en el hogar, aunque sea mínima, entonces el hombre es visto prácticamente como un “héroe” realizando una labor extraordinaria, cuando lo que debería ser es que, como parte de la cotidianeidad de las familias, el trabajo domestico sea una responsabilidad compartida en partes iguales.

El trabajo doméstico realizado por las mujeres es un aporte más a la economía del hogar, por la tanto aquí ya estamos hablando de una doble aportación que estas trabajadoras realizan para poder sacar adelante a sus familias, y en compensa lo que reciben es un ambiente de violencia en sus hogares.

El pensamiento machista en nuestras sociedades, obliga a miles de mujeres a vivir una explotación laboral constante, en la que no se les reconocen los más mínimos derechos como ciudadanas, mujeres y trabajadoras.


        
Es momento ya de dejar de ver el 8 de marzo como una efeméride más en nuestro calendario. Ha llegado la hora de que nuestras sociedades asuman a las mujeres como entes activos del desarrollo social.

A pesar de que la conmemoración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora surge como una demanda que reivindica la lucha constante de las mujeres proletarias, los gobiernos neoliberales se han apropiado de esta fecha para lavarse la cara y hacer de este día una celebración frívola nada más, por ello nos corresponde a nosotras, las mujeres trabajadoras, recuperar este día, que es solamente nuestro, recuperarlo para seguir peleando por nosotras, por nuestras familias y por nuestras sociedades.

Este 8 de marzo, las mujeres trabajadoras seguimos aquí, con el puño en alto luchando en contra del neoliberalismo y del patriarcado, por un mundo sin diferencias de clase y de género.

Gracias a Natalia (Valladolid))  por el texto enviado.